El amor es la mayor revolución: «Eón 3» de Ángel Rodríguez Cabrera.

La semana pasada fuimos a visitar  “Eón 3” de Ángel Rodríguez Cabrera. Es una exposición  de artes plásticas y está disponible en la Sala de Exposiciones de la Diputación de Alicante, hasta el 30 de agosto. Una vez dentro, nos encontramos con la grata sorpresa de que se encontraba allí el artista, y pudimos dialogar con él sobre su obra.

Antes de la charla, hicimos un recorrido por la exposición. La primera impresión fue la de encontrar un lenguaje pictórico muy consolidado, cargado de una simbología personal en base a motivos creados por el propio artista y de iconos de nuestra época que transforma para hacerlos suyos; todo ello hilado con naturalidad y perfectamente encajado en el discurso íntimo que el autor nos cuenta. El resultado de las sinergias simbólicas  con las que trabaja es una narrativa pictórica muy interesante y original, a la par que coherente.

Después, Ángel nos contó que a lo largo de los años había trabajado con diferentes técnicas, siendo la pintura con acrílico la que había permitido su total desarrollo y madurez como creador. Sus texturas se mueven por tejidos, es una pintura orgánica que se fusiona con una figuración que tiene reminiscencias al estilismo vienés de Egon Schiele.

Lunar

“Durante mucho tiempo he desarrollado una actividad artístico – creativa llena de sensaciones vitales, llegando a la conclusión de que sin las expresiones artísticas no hubiera colmado mi existencia. La necesidad de expresar mis sentimientos me llevó, hace mucho tiempo, a representar en una superficie bidimensional todas las cosas que en esos momentos iban moldeando mi personalidad. Desde entonces mi vida artística y mi vida personal corren cogidas de la mano y mi pintura se convierte en mi biografía. En y con ella, plasmo mis vaivenes sentimentales y cobran forma las líneas, las formas, los colores, como algo mágico, que transforman una superficie en blanco. Poco a poco maduramos juntos, yo con ella.»

Palabras de Ángel Rodríguez Cabrera,  encontrado en el texto de Isabel Munera dentro del Catálogo de la exposición, 2020

Eón 3 trata de una historia de amor que trasciende más allá de los acontecimientos. El autor nos contaba que la exposición era fruto de una evolución de años. En sí, no cuenta la típica historia, nos habla de instantes entrelazados que corren en paralelo al transcurso del tiempo. Fue emocionante sentir esa idea de amor por medio de sus obras. En cierto modo, su obra me parece revolucionaria, ya que esta temática, la del amor, actualmente queda fuera de los discursos de arte contemporáneo. También me pareció revolucionario relatar una historia personal en esta época artística tan “política”. Sin quererlo, Ángel ha contestado a los tiempos frívolos que corren, al poner en relevancia lo que ya no nos parece importante o especial, y contándolo, además, con su propio lenguaje.

“EÓN nace como la necesidad de inmortalizar el estado creativo del artista que hay en mí y al mismo tiempo seguir siendo cronista de mi propia doble personalidad”.

Palabras de Ángel Rodríguez Cabrera,  encontrado en el texto de Isabel Munera dentro del Catálogo de la exposición, 2020

Silencio

El amor, puede ser la mayor revolución, y es el caso de esta exposición. Terminamos nuestra charla con Ángel hablando del mercado contemporáneo del arte, de los intereses interpersonales, de toda esa bazofia que a veces quita las ganas… Pero también de ese impulso, de esa vocación, que va más allá de cualquier barrera… Amor a la profesión, amor en conexión al mundo y todo lo que conlleva, ese amor que no tiene nada que ver con el “amor romántico”, ¿se puede llamar amor? 

 

Agujero